Volcanal
Los primeros edificios en el valle del Foro Romano fueron los templos dedicados a las deidades arcaicas; el templo más antiguo es el Volcanal, un altar erigido en honor del Dios Volcán cerca del Comitium.
El dios Volcán era originalmente un dios etrusco conocido como Velchans a quien estaban conectados todos los eventos relacionados con el fuego como volcanes, minas de azufre y un relámpago, y que iba a ser honrado con sacrificios en los templos dedicados a él.
Cuando, después del episodio de rata de las Sabinas, el choque entre los romanos y sabinos acabó con la fusión de los dos pueblos, el rey Tito Tatio quiso construir un altar dedicado al dios Volcán en el mismo lugar donde tuvo lugar la batalla. Donde se hallaba este altar se construyó un santuario donde se reunìa el consejo de los Padres de la Curia y cerca de este màs tarde fue construido el Comitium donde se llevan a cabo asambleas de las tribus de los dos pueblos.
El santuario era una meseta en la que se encontraba el altar y se llamó Área Volcani y siendo un terraplén que sobresalìa al Comitium de casi 5 metros, los gobernantes, los reyes antes y después los cónsules, desde allì hablaron a lo representantes del pueblo reunidos en el Comitium. En esta zona se erigieron monumentos honoríficos como la cuadriga de bronce que Romulo os colocó por su victoria sobre Caninienses, la estatua de Romulus con una corona de laurel y la estatua que el Senado quiso erigir a Horacio Cocles, el ganador del choque con Curiatios, los campeones del pueblo de los Albaneses que Roma derrotò y sometiò.
La extrañeza de Volcàn a la religión romana arcaica està remachada por el sitio donde su altar fue construido: fuera de los muros de la ciudad de que Romulo había trazado los límites; se tardó tres siglos porque altares dedicados a Volcán se incluyeron en la ciudad. Las fuentes literarias ademàs proporcionan información que parecen discordantes; según Plutarco se construyeron dos altares de Volcán, uno por Tito Tatio, que estaba ubicado cerca de la ciudad (el cerca del Comitium) y otro por Rómulo que èl erigió fuera de su Roma Cuadrada, a lo largo de las laderas de la Palatium y enfrente de Velia de la que todavía no está cierta la identificación. El santuario del dios Volcán debìa ser necesariamente afueras de la ciudad, ya que, como dice Plinio, durante los días dedicados a él podían salir incendios espontáneos de la tierra.
Como Vesta era la diosa del "buen fuego", la del hogar doméstico, Volcàn era el "fuego destructivo" que, en la evolución del culto fue exorcizado y transformado en el fuego de la guerra; la primera función de Volcán era recibir y destruir las armas enemigas, y más tarde, tras reunirse con la cultura griega adquirirá algunas de las funciones de Hefesto, el dios griego del fuego, y que será quien utilice el fuego para forjar armas.
El Volcanal, el uno cerca del Comitium donde fue honrado el dios arcaico, nació entonces como un lugar de paz entre los romanos y sabinos, entre Rómulo y Tito Tatio por lo que se convirtió en un símbolo de la armonía y fue por esta razón que Furio Camilo en el año 367 a.C. hizo construir el primer Templo de la Concordia justo al lado del altar de Volcàn.
El carácter sagrado de la zona también fue destacado por otros elementos tales como el árbol de loto plantado por Rómulo y que aún vivìa al tiempo de de la República para que sus raíces descendieron por debajo de stationes munipiorum, los locales que estaban en el Comitium donde se reunìan los ciudadanos de otras ciudades de Imperio romano ...
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