64 d.C. Roma arde en llamas
La noche del 18 de julio de 64 dC un incendio estalló en el Circo Máximo, son razones desconocidas, se supone que se accionò con las mercancías que estaban en las tabernae que daban hacia la Colina Palatina.
Los vigiles no pudieron llegar al frente del fuego porque se vieron obstaculizados por la gente que intentaba escapar, y también muchos de los accesos del agua fueron bloqueados; el fuego alimentado por fuertes vientos del oeste se movió hacia el Palatino, Celio y Oppio.
Cuando el incendio atacó la colina del Palatino, los palacios imperiales fueron al fuego y también la Domus Transitoria, el palacio de Nerón donde él, amante del arte había recogido innumerables obras de arte que fueron perdidas irremediablemente; El emperador en ese momento estaba en Antium, y al recibir la noticia pronto regresó a Roma para organizar las acciones defensivas y los esfuerzos de socorro.
Cuando Nerón llegó a Roma, el Palatino y Celio estaban completamente quemados y sòlo se podía tratar de detener el avance de las llamas de que los edificios en las laderas del Oppio fueron demolidas para salvar el Esquilino.
Roma, en el año 64 dC, tenía aproximadamente 1.300.000 habitantes en su mayoría acurrucados en las insulae, en el incendio quemaron casi 4.000 de éstas y en algunos los vigiles no pudieron llegar. Los muertos fueron miles y decenas de miles de personas sin hogar; para dar cabida a las personas que habían escapado del fuego y habían perdido sus casas, más de 200.000 personas, Nero abrió los jardines de Agrippa en el Campus Martius, donde se construyeron cuarteles como vivienda temporal y, además, como lo señaló Tácito "fueron transportados objetos útiles de Ostia y de los municipios vecinos, y se redujo el precio del trigo a tres sestertius ".
Seis días más tarde parecía que el fuego se había detenido, pero otros fuegos aislados se incendiaron en la ciudad, uno de los cuales estalló en los jardines de la domus de Tigellino, el prefecto de la guardia pretoriana y consejero de Nerón, acertò el “ Milla cuadrado de Oro" de Roma donde vivió la aristocracia del Imperio, sin tocar los barrios populares. El fuego se ardió con fuerza y disparó otros tres días; fue una lucha desigual. Roma quemó durante nueve días y al final de los catorce distritos en los que se dividió la ciudad sólo tres no serán tocados por el fuego: Transtiberim, la Isla del Tíber y los barrios más allá del Tíber, el Circus Flaminius, la Regio que incluía la zona sur de El Campus Martius, y la Via Lata, a los lados del camino consular de Flaminia que corría entre los barrios que llegaban hasta Collis Hortularum.
Durante los días en que el fuego devoraba a Roma, barrio después de barrio, Nerón sacó su patrimonio personal para llevar los primeros auxilios a la enorme multitud que quedaba sin hogar, sino que también se esforzó personalmente deambulando por las calles de noche y de día, y a veces incluso sin la escolta habitual. Los historiadores reconocen que en esos días Nero actuó como un verdadero líder que ayuda y asiste a su pueblo de modo que también hay una anécdota según la cual por la noche el emperador se iba por las ruinas todavía ardiendas para buscar a los sobrevivientes.
Al final de los nueve días de las catorce Regiones, tres fueron completamente quemadas: III Isis y Serapides, IX Circo Máximo y X Palatine, otras ocho resultaron gravemente dañadas ...
Para leer el artículo completo suscribirse!
de M.L. ©ALL RIGHTS RESERVED (Ed 1.0 - 28/03/2017)